Weihenstephaner Vitus
Weihenstephaner Vitus
Bayerische Staatsbrauerei Weihenstephan
Weizenbock · 7,7% ABV · 17 IBU
Weihenstephaner Vitus procede de una de las fábricas de cerveza más antiguas del mundo, cuyo origen está rodeado de leyendas. Hay quien afirma que se fundó en el año 1040, siendo así la fábrica de cerveza en funcionamiento más antigua del mundo, otros aseguran que se fundó en el año 1146. La verdad siempre será un misterio. Se encuentra situada en la ciudad bávara de Freising, Alemania. Una cerveza fuerte de trigo, con un equilibrio perfecto entre todos sus matices, que más que recordar a una cerveza Bock se asemeja más a una cerveza Weissbier intensa y afrutada. Uno de los secretos de su elaboración es el prolongado tiempo de maduración.
Nota de cata
Aspecto: Color dorado intenso, aspecto turbio y brillos ambarinos. Espuma blanca, muy consistente, duradera y de fuerte adherencia a las paredes del vaso, dejando un poco de “encaje de Bruselas”.
Aroma: Marcado aroma a plátano maduro, clavo de olor y pan. Su intensidad en subproductos de la fermentación hace que tenga toques especiados y florales que recuerdan un poco a las levaduras belgas.
Sabor: Tiene un punto ácido por la alta carbonatación, equilibrado con el dulzor a plátano que deja en el retrogusto. Los sabores son suaves, a clavo de olor y granos de trigo que recuerdan a pan. Se aprecia un burbujeo aterciopelado por la carbonatación, dando una sensación espumosa. El alcohol es imperceptible. Cuerpo medio-alto, sin ser empalagosa, fácil de beber.
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